25/8/07

La maravillosa compra del cd.

No es lo mismo un cd original q uno trucho, no es lo mismo tener todos los temas en la compu q tener el cd. Y es q es todo un gran proceso.Lo vemos ahí, en el local/puesto, y ya soñamos con tenerlo en nuestras manos, sentirlo, q nos pertenezca.Lo ponemos al fonde de los cd, para q nadie más lo encuentre (como si fuera alguna clase de escondite ultrasecreto) y nos vamos, decididos a conseguir la plata para comprarlo.Una vez q la tenemos, volvemos al local. En el trayecto, vamos felices, sabiendo q por fin, lo tendremos, pero al mismo tiempo, evitamos hacernos taaantas ilusiones, por si no llegase a estar (aunque sabemos q nada haría q no nos amarguemos el resto del día...), estamos ansiosos. Entramos al local y vamos directamente al lugar "secreto" donde lo habíamos dejado (tenemos el mapa en nuestra cabeza...no podemos recordar q explicó la profesora el día anterior, pero sí dónde está el cd q vimos la semana pasada). Lo sacamos y, con paso decidido y rápido vamos a la caja. Queremos terminar con este trámite tan molesto q se interpone y nos resta tiempo en escucharlo. Pagamos y guardamos (nunca en tu vidad tuviste tanto miedo de q te robaran la mochila como ahora).El camino hasta la casa es insoportable!! no llegamos más! y la ansiedad, la felicidad, nos mata! En el subte/colectivo/tren/taxi/avión/submarino, no podemos más y sacamos el cd, listos para abrirlo, al tiempo q miramos alrededor, asegurándonos de q NADIE pretenda sacárnoslo (como si pudieramos intimidarlos con la mirada). Rompemos cuanto papel haya ahí, y sentimos, ahora sí, la cajita. SOnrisa de por medio, la abrimos y vemos le cd. Lo acariciamos, porque es bello, porque es nuestro, porque lo queremos y él nos quiere, nos completa, nos llena el solo verlo. Agarramos el librito y recorremos sus páginas, pasando suavemente el dedo, como si estuviera hecho con "papel de biblia", pero es más sagrado. Las letras, las fotos, los colores, los nombre de los coloaboradores y los de los integrantes. Absorvemos todo con la mirada.Por fin llegamos a nuestra casa. Entramos y tiramos todo. Sacamos el cd, prendemos el equipo y lo ponemos, a todo volumen. Esos segundos entre q ponemos el cd y la música empieza son de pura exitación: cumplirá con nuestras expectativas?cómo arranca?cuánto nos volará la cabeza?Y empieza. La primera nota. La cumbre del éxtasis. Y esa sensación de explotar q nos viene de lo más profundo y después, nos calmamos. El tema ya empezó. Los instrumentos, las voces, ya están haciendo lo suyo y el sonido nos envuelve, nos abraza y no nos deja ir. Y nosotros nos dejamos abrazar. Nos sentimos maravillosos. Nos sentimos completos. Le seguimos el ritmo. Y nos ponemos en la posición más cómoda para disfrutarlo.


Y acaba. Pero no lo podemos dejar ir. Y vuelve a empezar. Ahora ya sabemos cómo sigue, y tal vez no sea todo tan fuerte como antes, pero no por eso lo disfrutamos menos. Porque ya lo oimos, y ahora, lo vamos a conocer, hasta la última nota.

1 comentario:

Nahuel dijo...

Che Tato! Está buenísimo esto! Sos grossa, sabelo :) Me voy a morfar tus blogs. Provecho!