28/10/09

Detrás del escritorio

El odio hacia mi trabajo no pasa por un jefe que me maltrata, ni por el estrés, ni por la gran responsabilidad que cargo sobre mis hombros. No. El odio hacia mi trabajo pasa por la falta de actividad laboral. Soy secretaria. Un día es interesante si suena el teléfono, y ahora, para colmo, tiene identificador, por ende, puedo saber quién llama, y en algunos casos, la conversación se desarrolla como si estuviéramos leyendo un libreto.

MP:-Hola, C., está el Jefe?
Yo:-Hola, cómo está? No llegó todavía, pero si quiere le agendo el llamado.
MP:-Sí, C., decile que por favor, en cuanto llegue, me llame.
Yo:-Sí, no hay problema, yo le digo.
MP:-Gracias, chau.

Y estoy siendo TEXTUAL.

Si el teléfono no suena, se puede decir que fue un día total y completamente inútil. Y aparece el gran temor: ¿la lima que está debajo del escritorio (que no es mía, sino de la V.) se apoderará de mi alma y me convertirá en... LA TIPICA EMPLEADA ESTATAL? No se entiende cómo aún no se hizo una película sobre tan terrorífica figura.

Si ud.:
-tiene la voz chillona.
-se cree superior al resto...
-y lo maltrata en consecuencia.
-se lima las uñas y/o hace cualquier tipo de arreglo sobre las mismas
-es total y completamente ineficiente.
-es irritante
-si trabajara en atención al cliente, podría llegar a decir "disculpe, señor, no puedo resolver su problema, aún falta un minuto de mi almuerzo" y a continuación, tararea alguna música odiosa mientras se mira las uñas (y/o las sopla).
-usa ropa que ya no es acorde a su edad (por ejemplo, espantosos escotes a los 60... y no tiene el cuerpo de una diva, de una modelo...)

O si cumple con al menos 4 de estas cualidades, que pueden o no venir acompañadas de otras igualmente insoportables, tenga por seguro que ud. es la Típica Empleada Estatal, si trabaja en un organismo estatal (es decir, su sueldo, son nuestros impuestos y aportes), o actúa como tal, si no es parte del "staff".

Con mis recién cumplidos 20 años, pensar en tal perspectiva de vida, es, realmente, aterrorizante, y más si una estudia algo que poco tiene que ver con todo esto. Pensar que yo podría llegar a ser la próxima Vieja de Mierda y atormentar a una joven que trabaje conmigo... escalofriante. Es como si uno se pasara al Lado Oscuro de la Fuerza. Brrrr...

Que el poder Jedi nos ampare de tal apocalíptico final. Oh, joven Luke, líbranos del mal.

Por lo pronto, dedico mis horas laborales a desarrollar mi capacidad creativa. Pero el manto gris del aburrimiento se extiende también sobre esta área del cerebro. Solo me quedan los ocasionales posteos... y ni siquiera para ellos estoy inspirada todo el tiempo. O "full time", como se dice en la jerga laboral. Idiota full time.

26/10/09

Indie

Evadir. Una de mis palabras favoritas. Evadir pensamientos, recuerdos. Mantener la mente ocupada, para evitar que vuelva una y otra vez sobre lo mismo y que se ponga a pensar. Porque ya sabemos, de innumerables experiencias, que pensar no es bueno, no hace bien, solo nos lleva reiterativamente a analizar un mismo hecho, desde todos los puntos de vista posibles y a llegar a conclusiones estúpidas, que nos queman la cabeza. Entonces, evitemos pensar. Evitemos toda referencia a ello.

Y sería de suma utilidad que tuviera algo para hacer en la oficina, que me ayudara a ocuparme de otras cosas. Pero no, los lunes no pueden ser buenos, las cosas no son tan sencillas. Nena, soy la Vida, y no te voy a solucionar tus problemas, ni a darte todo servido en bandeja de plata.

Un final Fox Searchlight y un Michael Cera vomitando en la sala.

23/10/09

20

Cuando uno trabaja, y más aún, en un lugar con mucha gente, y más aún, en un puesto donde lo conocen más personas que las estrictamente relacionadas con su labor, el día de su cumpleaños, se vuelve bastaaante agotador. Son varios los que mandan mail y se pasan por la oficina a saludar (y un desubicado que cantó el feliz cumpleaños por teléfono...). ATENCIÓN: no es mi intención insinuar que "mucha gente quiere saludarme", seamos claros: soy secretaria: todo aquél que necesite una sala de reuniones, mandar un fax, sacar una fotocopia, ingresar o sacar algo del edificio, o hablar con mi jefe, debe pasar y, al menos, verme sentada en el escritorio. Y como no tengo mucho para hacer (y odio a los malaprendidos que entran y ni hola te dicen), saludo y ofrezco mi ayuda para lo que necesiten: sí, en el trabajo, parezco una persona amable (y sí, me doy asco a mi misma). A esto, hay que sumar las salutaciones de los parientes y amigos de la familia. Para el final del día, uno ya no sabe qué contestar, sonríe y asiente, mientras por dentro, piensa "basta, por dios". Aquí, un listado con posibles respuestas (queda en el lector decir cuál aplicar, si es que desea usar alguna, en una situación particular):

-Gracias, ya me queda un año menos de vida.

-Sí, es un placer festejar la noche en que mi madre se excedió con la bebida.

-¿Qué hay que felicitar? Odio mi cumpleaños.

-Mal. Se murió mi hermano.

¡UN MOMENTO! Ya había habido un desubicado cantante telefónico. LO QUE NO ESPERABA, es que, tras el mail que manda para cada cumpleaños, la Vieja me llamara!! Recreeemos la escena un momento:

Int. Día. Oficina.
Suena el teléfono. Tato atiende.
Tato:-¿Hola?
Vieja:-¡Qué los cumplas feliz, que los cumplas feliz...!
Tato: 0_0 jrrrr (ahoga una risa)
Vieja:-¿te gustó?
Tato:-seee

Era mejor cuando no me hablaba.

Seguimos con el listado:

-Sí, es hoy... bah, como mis viejos biológicos me dejaron dentro de una bolsa en el cordón de la vereda, cuando me inscribieron, pusieron otra fecha.

-Sí, voy lo voy a festejar tomando hasta entrar en coma alcoholico, pero por las dudas, me llevo forros, a ver si me pasa como a mi vieja.

-Gracias. Pero no traje nada comestible para compartir.

-Gracias. Y esos bon o bon que traje... no son para vos.

En fin, la escritura de este posteo se vio interrumpida varias veces. Y ya es hora de irme. Hasta aquí llegan las posibles respuestas, pero cada lector, puede seguir aportando.

Felicidades a Germán. =)

5/10/09

Me estoy carcomiendo la cabeza.

Maldito Dawson's Creek, siento como si estuviera en un capítulo.

Excelente fiebre de sábado por la noche. Excelente. Lo que no fue excelente, fue la filmación del domingo, sintiendo que me iba a desplomar en cualquier momento. Y tampoco es excelente el estado "zombie" en el que me encuentro este lunes. Pero excelente sábado.

Ser zombie y carcomerse la cabeza no es una buena combinación. Shit.